Cristóbal Llorente

El rugby es "un deporte que incluye a todos, les ofrece alternativas para desarrollar destrezas físicas, y tiene algunos puestos para grandes estrategas. Tiene una impronta de caballeros y un final de fiesta que une a los contendientes. Toda una lección para el mundo de hoy."

Cristóbal "Tobal" Llorente fue capitán del equipo de rugby del Instituto San Martín de Tours de 1980; su hijo Felipe sigue sus pasos jugando en el club de Rugby San Martín de Tours. Actualmente Cristóbal es entrenador de la división M11 y miembro de la Comisión de Rugby.

Rugby SMT - ¿Cómo es tu historia con el rugby y como te involucraste con el proyecto del Rugby San Martín de Tours?
Cristóbal Llorente - Al rugby me inicié en el Champagnat, colegio al que concurrí en la primaria. Antes solo había hasta sexta división (14 años) y viendo jugar a mis hermanos mayores me apasioné y por suerte para mí se crearon en 1971 la séptima y octava y en 1972, la novena y décima. Así formé parte de la primera décima división. Jugábamos de 15 (no se como hacíamos pero nos divertíamos mucho). Luego en sexto grado me pasé al San Martín de Tours y si bien jugué toda la vida en Champa, donde integré el plantel superior a partir de 1982, lo cierto es que ya en segundo año de la secundaria empecé a jugar los intercolegiales en SMT. Fue una experiencia muy linda porque jugábamos entre semana, jugábamos con muy buenos jugadores de otros clubes que venían al colegio (alumni, Sic, CUBA, CASI, etc.) y el ritmo de juego era muy abierto, había un 20 o 30% de los jugadores que jugaban por primera vez, entonces por un lado les explicabas el juego y por otro te hacías una fiesta porque no había el mismo nivel de exigencia y con algunos buenos jugadores armábamos un equipo muy competitivo. Tuvimos muy lindos partidos, tengo en mi memoria un seven que ganamos en SIC, en una final con Labarden (jugadores de SIC y Pueyrredon en su mayoría) que fue memorable. También tuve la suerte de integrar el seleccionado de la cuarta división que le llamaban pumitas pero que era básicamente el seleccionado de Bs. As. Allí jugué con jugadores de la talla de Diego Cash, Fernando Sainz Trapaga, Eduardo Torelo etc., y ganamos el campeonato Nacional con la final en Rosario contra Santa Fe. Al proyecto de SMT me incorporé por la invitación de Carlos Valiente Noailles que es un emprendedor decidido al que vale la pena seguirlo y porque mi hijo Felipe que estaba haciendo sus pininos en Regatas de Bella Vista le gustó la idea de jugar con la camiseta esa que papá tiene en algunas fotos.

Rugby SMT - ¿A que colegio va tu hijo Felipe y por qué lo enviás al Rugby San Martín de Tours?
Cristóbal - Felipe va al Colegio Las Marías de Bella Vista, donde sus compañeros juegan en Regatas, o en CUBA y como te decía él jugó el año pasado en Regatas, pero este año no había empezado a jugar y cuando le conté de éste proyecto le gustó y esta muy entusiasmado como no había estado el año pasado en Regatas.

Rugby SMT - ¿Como ves el avance del proyecto de Rugby San Martín de Tours y cuales son tus deseos para el futuro?
Cristóbal - El avance del proyecto lo veo firme y sin pausa, con mucha dedicación y entusiasmo por todo el staff que lo lidera. Veo muy buena predisposición y profesionalismo para encarar los obstáculos que naturalmente se presentan en la concreción de un proyecto. La verdad es que lo estoy disfrutando hoy porque es muy interesante desde muchos puntos de vista. Hacer algo por la sociedad en que vivimos puede tener muchas alternativas, pero la formación de la juventud a través de valores que tengan que ver con el juego de sus destrezas en grupo, es brindarle las herramientas a nuestros hijos en un mundo altamente competitivo, para que sepan pelear como los mas rudos cuando lo que se juega es importante y sabiendo que como seres humanos todos merecemos una mano para levantarnos después de un buen tacle, aunque ocasionalmente haya sido nuestro contrario en cualquier contienda de la vida. ¿El futuro? esta abierto, tengo el deseo natural de que el proyecto crezca, sume de a poco a la comunidad de SMT, si bien soy conciente de que muchos clubes grandes, chicos y medianos tienen dificultades, eso no implica que no pueda nacer uno nuevo, formar un nuevo modelo, con valores de rugby universales, pero con identidad propia. SMT tiene todos los recursos humanos necesarios, tiene infraestructura para empezar, gracias a la buena predisposición de los Agustinos y líderes naturales para llevarlo adelante.

Rugby SMT - ¿Como ves la evolución de los chicos de la división que vos entrenás?
Cristóbal - Nosotros con Javier Fernandez Tarigo y Nacho Garciarena estamos nucleando a un grupo desde diez a doce años. Los hemos visto progresar sábado a sábado, un partido mejoran en el tacle y la defensa, otro sábado los vemos tomar confianza en el ataque y el apoyo al compañero, cada jugador tiene sus tiempos pero principalmente los vemos divertirse y conocerse entre ellos y de a poco los vemos comprender la filosofía de un deporte, que tiene en la filosofía una de sus claves. Un deporte que incluye a todos, les ofrece alternativas para desarrollar destrezas físicas, y tiene algunos puestos para grandes estrategas. Tiene una impronta de caballeros y un final de fiesta que une a los contendientes. Toda una lección para el mundo de hoy.

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